Ejercicios para adultos con TDAH

13 diciembre, 2017 , , / Mateusz

El ejercicio es bueno para el cerebro

Durante su vida adulta, las personas con trastornos de TDAH a menudo luchan con la falta de concentración, el pensamiento lento, el olvido, la distracción, la impulsividad. Estas características tienden a ser devastadoras tanto para las relaciones con sus seres queridos como para sus carreras profesionales. Además, todos están vinculados al órgano más importante del cuerpo humano: el cerebro.

El ejercicio físico puede ayudar a oxigenar el cerebro, iniciar el proceso de liberación de dopamina y endorfinas, aliviar y mejorar el estado de ánimo y disminuir la tensión. Por lo tanto, el deporte tiene un efecto similar en el cerebro como medicamento. Esta es la razón por la cual los adultos con TDAH no deberían abstenerse de practicar deporte, sino todo lo contrario: la actividad física debería complementar el tratamiento del trastorno.

¿Qué brinda el ejercicio a las personas con TDAH?

Con ejercicio físico:

  • usted reduce el nivel de estrés,
  • reduces las reacciones compulsivas,
  • Mejoras tu memoria
  • mejora sus habilidades ejecutivas esenciales para planificar, organizar y recordar detalles,
  • aumentas el nivel de BDNF – proteína secretada por las neuronas, necesaria durante los procesos de aprendizaje y memoria.

Además de la actividad física:

  • ayuda a mantener una figura atlética y un peso corporal óptimo,
  • previene la obesidad, la diabetes, las enfermedades del corazón y el cáncer.
  • reduce la presión arterial y el nivel de colesterol.
  • mejora el humor,
  • te da energía por el resto del día.

¿Cómo no perder su motivación para hacer ejercicio?

A pesar de los excelentes efectos provocados por el ejercicio, muchas personas se desaniman después de los primeros días de entrenamiento. ¿Cómo asegurar que los ejercicios no te aburran mientras cada día posterior de entrenamiento se vuelve aún más agradable?

  • al comienzo de su aventura con el ejercicio, no debe esforzarse hasta el límite (es suficiente aproximadamente media hora de ejercicio por día),
  • deportes más exhaustivos, como correr, se pueden hacer en intervalos de tiempo más cortos, por ejemplo, 3 veces por semana durante 25 minutos,
  • las personas que se aburren rápidamente pueden cambiar el tipo de ejercicio o deporte, por ejemplo: correr con natación o aeróbicos,
  • si algunos ejercicios despiertan resentimiento, uno no debería forzarlos,
    es bueno encontrar una segunda persona o un grupo de apoyo que se motive para hacer ejercicio.

Hacer deporte se puede observar en la rutina base la forma en que le permite a mantener una buena salud, desconectar de los problemas cotidianos y el estrés. Puede supervisar la forma en que su concentración mejore, junto con la capacidad de pensar rápido y fácilmente. De esta manera simple, se asegurará de que sus debilidades no controlen su vida.